Cuando me decís que me aleje de vos, me pongo a pensar en dos cosas: en que quizás alejarme sea lo mejor para vos o que quizás, también, me pedis que me aleje para que me acerque más y no me atreva a dejarte solo... Y puede que no entienda tu lenguaje y que seamos tan diferentes que ni siquiera cuando creemos que somos parecidos realmente lo somos. Puede que me cueste quererte cuando en verdad no entiendo por qué ni cómo es que empecé a hacerlo pero sigo haciéndolo. Porque cuando a veces las palabras del diccionario no explican nada sobre la vida, vos encontras la forma, las palabras y hasta la solución a cada dolor. No importa que me hagas sufrir con tus idas y venidas porque a pesar de todo, me duele más no tenerte que no saber si realmente te tengo.